Acá hay tres clases de gente: la que se mata trabajando, las que deberían trabajar y las que tendrían que matarse.

martes, 21 de diciembre de 2010

Un amanecer lleno de ciruelos
y treinta rayos besando(nos) la cara
ser aquello que no fuimos y que somos
entre risas,sueños,besos y deseos perdernos un poco
Lleno de jilgueros susurrando al oido este amanecer
ser otra vez niños,volver a nacer
creer en los viejos cuentos,perdernos en el silencio,creer sin tener que ver
un cielo raso sobre nuestras nucas
arboles,y tu guitarra esperando, desnuda.
La vida y las vueltas,
como aquel reloj de palito prendido a tu chaqueta
se traen una juerga de aquellas,
una juerga de ocaso,ríos y flores
silbidos de la brisa y 15 nuevas canciones...
Mirar otra vez el silencio
mirar y sentir la vida en todo su apogeo
un centellar de palabras nuevas invadiran el alma
nervios luego y despues risa traera la calma
sentirse de pronto presa de las palabras,
gritar y reir ,perderme en el goce de tu mirada
no decir nada y decir todo solo con besar la música que emanas,
Un amanecer lleno de ciruelos
y 20 dedos perdiendose en el suelo
amasando la tierra de la que estamos hechos
perdernos en ella como tu piel en mis poros
bebernos como al muday,celebrar y agradecer
tanto cielo pa volar
tanta tierra pa oler...
Un amanecer de ciruelos tiernos
el desnudo canto de tu guitarra al viento
el fuerte rojo del alma de las loicas
y el cielo desnudo tocando nuestras bocas...

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