Acá hay tres clases de gente: la que se mata trabajando, las que deberían trabajar y las que tendrían que matarse.

sábado, 5 de enero de 2013

 Despierto y observo que hermoso es el día, afuera hay un sol que partiría cada una de mis huellas digitales, busco girar mi cuerpo y asi enderezarme para apreciar mejor el espectaculo y pienso que ha sido una noche de mierda. Una noche mas de mierda. Durmiendo con los dientes apretados, con las manos vueltas, torcidas como un resorte, un manifiesto de los remolinos que llevo adentro... Cautelosamente reviso los alrededores y no hay mas que la estela de los recuerdos, ya no quedan olores, ni pisadas, solo frases que interpreto a cada segundo y con ellas tomo desayuno, las esparzo sobre las tostadas mientras enciendo el televisor. Que rico es el te con leche, aunque hoy sabe a petroleo (mala la wea pienso) Donde habra quedado mis habilidades para cocinar esta mañana? atrapadas probablemente en uno de tus recuerdos.
Afuera una bicicleta y una ruta, una nueva ruta